TARTA SEMIFRÍA DE FRESAS
Es perfecta para seguir aprovechando la temporada de las fresas y comerlas de distintas maneras. Queda muy rica y suave. No hay más que verla.
Su elaboración es sencilla y ademas da mucho juego ya que la puedes servir como tarta helada o semifría. Es decir, congelada pero guardada en el frigorífico unas horas. De esta manera se consigue un postre frío y refrescante, pero no helado. Es una tarta ideal para cuando no tienes tiempo de preparar algo dulce pues la puedes hacer cuando quieras y tenerla guardada en el congelador.
Para la base he utilizado sobaos, que le proporciona una textura uniforme y un sabor a mantequilla muy rico.
Espero que os guste!!!!!
Ingredientes:
Para la base:
Su elaboración es sencilla y ademas da mucho juego ya que la puedes servir como tarta helada o semifría. Es decir, congelada pero guardada en el frigorífico unas horas. De esta manera se consigue un postre frío y refrescante, pero no helado. Es una tarta ideal para cuando no tienes tiempo de preparar algo dulce pues la puedes hacer cuando quieras y tenerla guardada en el congelador.
Para la base he utilizado sobaos, que le proporciona una textura uniforme y un sabor a mantequilla muy rico.
Espero que os guste!!!!!
Ingredientes:
Para la base:
- 4 sobaos
- 400 gr. nata para montar
- 600 gr. queso tipo Philadelphia
- 100 gr. mermelada de fresa
- 4 cucharadas de azúcar
- 200 gr. fresas
He utilizado un molde desmoldable de 23 cm.
Preparación:
- Comenzamos preparando la base de la tarta. Para ello, trituramos los sobaos con cualquier robot de cocina.
- Ponemos los sobaos desmigados en la base de nuestro molde y alisamos la superficie con la ayuda del dorso de una cuchara. Tenemos especial cuidado en los bordes.
- Una vez preparada la base, montamos la nata bien firme. Reservamos.
- Para hacer la primera capa de nuestra tarta, batimos 300 g de queso.
- Al queso batido le añadimos la mermelada de fresa. Batimos de nuevo y por último incorporamos con movimientos envolventes, la mitad de la nata montada reservada.
- Volcamos la crema sobre la base de sobaos y alisamos la superficie con el dorso de una cuchara.
- Para hacer la segunda capa, batimos los otros 300 g de queso junto con las 4 cucharadas de azúcar.
- Añadimos el resto de la nata montada y la integramos con cuidado para que ésta no se baje.
- Volcamos la crema de queso sobre la primera capa de color rosada.
- Alisamos la superficie de la tarta.
- Metemos al congelador (mínimo 5 horas).
- Sacamos del congelador y decoramos. Para ello, lavamos las fresas, les quitamos el rabito, secamos con cuidado y las colocamos sobre la superficie de la tarta. Guardamos en el frigorífico un par de horas.
Y a disfrutar!!!
Genial. Qué buena pinta!
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