MERMELADA DE FRESAS

La primavera es el momento de muchas frutas de temporada pero, sobretodo, de fresas y fresones. En el mercado encontramos una gran cantidad y variedad, así como distintos precios, en función de la calidad del producto. Resulta mucho más económico adquirir cajas de dos kilos y además, podemos tomarlas en infinidad de formas: en batido, con nata o azúcar, utilizarlas en multitud de postres o  simplemente pasadas por agua. Y si nos sobran, podemos hacer mermelada ya que nunca sobra en cualquier despensa.

La mermelada es una buena forma de conservar la fruta para poder disfrutar de ella fuera de temporada. En este caso, os propongo una mermelada de fresas, ideal para el desayuno, la merienda o acompañamiento de postres.
Es una mermelada que suele quedar bastante líquida y a mí me gusta añadirle un par de hojas de gelatina hidratadas para que espese y que quede así, en el punto de espesor que me gusta.

Espero que os guste!!!

Ingredientes:

• 500 gr. de fresas
• 10 gr. de zumo de limón
• 390 gr. de azúcar
• 2 hojas de gelatina (opcional)

Preparación tradicional:

1. Lavamos las fresas en agua y quitamos el rabillo, las secamos con papel de cocina y cortamos en cuartos.
2. En una cazuela de acero inoxidable, mezclamos las fresas con el azúcar y el zumo del limón.
3. Dejamos que macere la mermelada de fresas durante dos horas (más o menos), removiendo de vez en cuando.
4. Pasado las dos horas, ponemos la cazuela al fuego, cuando rompa a hervir, ponemos a fuego lento durante 30 minutos. De vez en cuando le quitamos la espumilla que suelte y removemos. 
5. El tiempo dependerá del agua que tengan las fresas. Os recomiendo empezar con 30 minutos y si queda muy líquida, lo dejamos otros 10 minutos más. Dependiendo de las fresas, puede que con 30 minutos y sin gelatina quede perfecta.
6. Pasados los 40 minutos, comprobamos cómo ha quedado la mermelada. Si vemos que está bastante líquida (teniendo en cuenta que al enfriar espesa un poco), en un bol con agua fría ponemos a hidratar las hojas de gelatina. Se las añadimos y removemos. 
7. Vertemos la mermelada en un bote o tarro de cristal, que previamente habremos esterilizado y dejado enfriar. Lo llenamos hasta arriba, lo tapamos y le damos la vuelta, de modo que quede la tapa hacia abajo. Así es cómo conseguimos envasarlos al vacío. Dejamos enfriar.
8. Cuando esté fría, guardamos en el frigorífico.

Preparación thermomix:

1. Lavamos las fresas y quitamos el rabillo. Las secamos con papel de cocina.
2. En el vaso de la Thermomix echamos las fresas, el zumo de limón y el azúcar. Programamos 25 segundos, a velocidad 5-7-9. Con la espátula, bajamos los restos que hayan quedado en las paredes y en la tapa del vaso, hacia las cuchillas.
3. Seguidamente, programamos 30-40 minutos, temperatura varoma y velocidad 3. El tiempo dependerá del agua que tengan las fresas. Os recomiendo empezar con 30 minutos y si queda muy líquida, poner otros 10 minutos más. Dependiendo de las fresas puede que, con 30 minutos y sin gelatina quede perfecta.
4. Pasados los primeros 5 minutos, quitamos el cubilete y colocamos el cestillo sobre la tapa para evitar salpicaduras y que así se evapore mejor.
5. A falta de 10 minutos para el final, en un bol con agua fría ponemos a hidratar las hojas de gelatina.
6. Pasados los 40 minutos, comprobamos cómo ha quedado la mermelada. Si vemos que está bastante líquida (teniendo en cuenta que al enfriar espesa un poco), añadimos las 2 hojas de gelatina hidratadas y programamos 30 segundos, a velocidad 3.
7. Vertemos la mermelada en un bote o tarro de cristal, que previamente habremos esterilizado y dejado enfriar. Lo llenamos hasta arriba, lo tapamos y le damos la vuelta, de modo que quede la tapa hacia abajo. Así es cómo conseguimos envasarlos al vacío. Dejamos enfriar.
8. Cuando esté fría, guardamos en el frigorífico.

Lista para disfrutar!!!!

FUENTE: " Mis thermorecetas "