GALLETAS SHORTBREAD DE CHOCOLATE

La verdad es que estas galletas "shortbread" de chocolate sorprenden ya que, para lo increíblemente sencilla que es su elaboración, el resultado final es absolutamente delicioso. Han desaparecido en tiempo récord.

Se trata de un tipo de galleta típica de Escocia que se caracteriza por llevar una buena proporción de mantequilla. Estas galletas no llevan levadura y su consistencia final es bastante frágil y blandita, pues se desmigan con facilidad.

Para hacer estas galletas he utilizado el método de hacer un rulo con film, refrigerar, cortar en rodajas y directo al horno. Una de las cosas que más me gusta de este método es que puedes preparar un montón de masa con antelación y dejar los rollos de galleta tranquilamente reposando en la nevera hasta el día siguiente.

Os animo a hacerlo!!!

Ingredientes:

• 175 gr. de mantequilla a temperatura ambiente
• 85 gr. de azúcar blanquilla o moreno
• 200 gr. de harina de repostería
• Dos cucharadas de cacao en polvo valor sin azúcar
• 100 gr. de pepitas de chocolate (yo he utilizado 50 gr. chocolate con leche y 50 gr. de chocolate blanco en trocitos)
• Un pellizco de sal

Preparación:

1. Ponemos en un bol la mantequilla (que esté blanda), el azúcar y la sal, y mezclamos con un robot con pala o con una cuchara de madera.
2. Tamizamos la harina con el cacao y lo añadimos a la mezcla de mantequilla. Mezclamos hasta homogeneizar.
3. Agregamos entonces las pepitas de chocolate y amasamos para distribuirlo bien (en mi caso los trocitos de los dos tipos de chocolate). 
4. Dividimos la masa en dos porciones y las moldeamos en forma cilíndrica o rulo.
5. Envolvemos bien cada cilindro con film y los introducimos en un tubo de cartón para que no queden planas por la base (sirve un tubo de papel de cocina).
6. Metemos los rulos en la nevera durante, al menos, tres horas. En este punto podemos congelar la masa y prepararlo otro día.
7. Cuando esté bien refrigerada la masa de galleta, sacamos uno de los cilindros y, con un cuchillo afilado, lo cortamos en rodajas de aproximadamente 1 cm, que iremos colocando sobre una bandeja de horno forrada con papel de hornear. Si vemos que está demasiado dura la masa, podemos dejarlo templar unos minutos.
8. Procedemos de igual manera con el resto de la masa.
9. Al cortar las galletas no es necesario que queden rodajas perfectas porque luego se desparraman en la cocción. Se trata de que queden todas de tamaño parecido.
10. Horneamos las galletas por tandas en el horno, previamente precalentado, a 180º C durante 10 ó 15 minutos.
11. Las dejamos enfriar sobre la propia bandeja hasta que estén templadas ya que en caliente son muy frágiles.

Y a disfrutar!!

FUENTE: "Maria Lunarillos"